Viaje iniciático en Substack
Mi inauguración en este espacio donde cuento de forma resumida lo que va a ser esto y que cosas voy a hacer aquí
Antes que nada, me gustaría compartir el por qué me he aventurado en el mundo de las newsletters. Hace poco más de un año, en otra plataforma llamada Revue, lancé una newsletter semanal que abarcaba noticias tanto nacionales como internacionales. El objetivo era mejorar mi habilidad para escribir historias, aprender cómo enviar noticias y reducir cualquier contenido innecesario en mis publicaciones. Sin embargo, cuando uno se embarca en un proyecto de este tipo, especialmente semanalmente, pueden surgir diversos problemas que obstaculizan la publicación en los horarios convenidos.
A pesar de algunos obstáculos, como las vacaciones o los períodos de exámenes, intenté ser lo más fiel posible a la actualidad mundial, siempre con mi toque personal, ya sea humorístico, reflexivo o una combinación de ambos.
Hoy en día, considero que contar noticias de manera efectiva es más exigente, quizás porque cada vez más personas son diagnosticadas con TDAH o porque los dispositivos móviles y otros dispositivos electrónicos han reducido el espacio para artículos opinativos o noticias de largo formato —como en el reportaje—.
Es por eso, y tal vez para desafiarme a mí mismo, que vuelvo al mundo de las newsletters. En ellas hablaré de uno o varios temas que me interesen, como un fisgón, de ahí el nombre de mi newsletter, y lo haré de la mejor manera posible: incluyendo enlaces a las fuentes que analice, mi visión personal sobre ellas y presentando todas las perspectivas posibles, es decir —intentado ver todas las caras de la moneda—.
Una de mis razones para adentrarme en este ámbito es intentar tener un feedback con la mayoría de la comunidad de Substack, de tal manera que me ayude a mejorar mi escritura y la elección de los temas que aborde. Además, también compartiré con ustedes a mis referentes que me han inspirado a embarcarme en esta travesía.
Finalmente, quiero agradecer a Sandra y Lola por ayudarme a elegir el logo y el nombre de mi espacio. Espero que esta aventura sea larga, llena de experiencias y, sobre todo, me haga un mejor periodista.
Después de todo, nunca dejamos de aprender.